El devastador colapso del techo de la discoteca Jet Set en Santo Domingo, ocurrido el pasado 8 de abril durante un concierto de Rubby Pérez, ha sacudido a la República Dominicana. El incidente, que cobró la vida de 231 personas y dejó 189 heridos, ha puesto en el centro del debate la responsabilidad tanto de los propietarios del establecimiento como del Estado dominicano.
El abogado Félix Portes, conocido por su experiencia en casos penales de alto perfil, fue contundente al señalar que el Estado debe asumir su parte de culpa. Según Portes, el artículo 148 de la Constitución establece que cualquier negligencia de un funcionario público hace responsable al Estado. “Si esta obra hubiera sido privada, ya estaría clausurada. El Estado no puede seguir evadiendo su responsabilidad cuando hay inobservancia que provoca tragedias”, afirmó en una entrevista reciente.
Portes también destacó que la razón social del Jet Set Club pertenece a la empresa Inversiones EyL SRL, lo que complica determinar responsabilidades directas debido a su estructura corporativa. Sin embargo, aseguró que ya se han identificado a los accionistas y que su equipo legal representará a las familias afectadas, incluyendo a aquellas con recursos limitados.
Expertos han señalado que la causa del colapso podría estar vinculada a fallos estructurales agravados por un incendio en 2023. Además, se reportó que el techo soportaba un peso excesivo debido a equipos como generadores eléctricos y aire acondicionado. Este caso ha evidenciado una cadena de negligencias tanto públicas como privadas.
Mientras el Ministerio Público avanza en las investigaciones, Portes confía en que este caso marcará un precedente en materia de justicia penal y civil en el país. La sociedad dominicana exige respuestas claras y acciones contundentes para evitar futuras tragedias.