En esta historia dramática, que parece no tener final, la modelo venezolana Aleska Génesis ha denunciado amenazas en su contra, alegando temer por su vida en medio de un escándalo que involucra el supuesto robo de relojes de lujo.
La controversia estalló el 10 de marzo de 2025, cuando Génesis fue detenida inmediatamente después de su eliminación del reality show «La Casa de los Famosos All Stars» de Telemundo.
La modelo, de 33 años, se encuentra actualmente en el ojo del huracán, acusada de robar relojes marca Rolex pertenecientes a Francisco Javier Rodríguez Borgio, conocido en México como «El zar de los casinos». En una rueda de prensa convocada por su equipo legal el 19 de marzo, Génesis no se presentó físicamente, optando por una intervención a través de videollamada debido a las presuntas amenazas recibidas.
«Tengo miedo de presentarme en un país donde quienes tienen el poder pueden hacer lo que les da la gana», declaró Génesis durante la conferencia. La modelo afirmó ser inocente y acusó directamente a Rodríguez Borgio de orquestar una venganza en su contra, alegando que el empresario está utilizando su influencia y recursos para manipular el sistema judicial.
Por su parte, Rodríguez Borgio no se ha quedado callado
En una entrevista exclusiva con el programa «El Gordo y La Flaca», el empresario aseguró que Génesis y su hermana Michell Roxana «se robaron un millón de dólares en dos relojes», específicamente un «Patek Philippe oro rosa Nautilus y un Richard Mille». «Son unas ladronas totales», afirmó Borgio, quien también reveló que no ha recuperado ninguno de los relojes robados.
El caso ha tomado un giro aún más complejo debido a la relación previa entre Michell Roxana, hermana de Aleska, y Rodríguez Borgio. Según el empresario, Michell lo acusó falsamente de intento de asesinato después de dos años sin verse, lo que resultó en su detención frente a su hijo. Sin embargo, estas acusaciones fueron desestimadas por falta de pruebas.
La situación legal de Génesis sigue siendo precaria. Aunque fue liberada horas después de su detención el 10 de marzo, tiene prohibición de salida del país hasta que se esclarezca lo sucedido. Su equipo legal alega que el caso, que previamente había sido cerrado a favor de Génesis, fue reabierto con «pruebas falsas».
Este escándalo ha generado un intenso debate sobre el poder y la influencia en el sistema judicial, así como sobre la seguridad de las figuras públicas. Mientras Génesis insiste en su inocencia y denuncia una campaña de persecución, Rodríguez Borgio mantiene sus acusaciones, prometiendo llevar el caso hasta las últimas consecuencias.