El mundo del reggaetón está en shock. Daddy Yankee, el ícono del género, y su esposa Mireddys González están en medio de un proceso de divorcio que ha capturado la atención de todos.
La fecha clave es el 10 de enero de 2025, cuando se llevará a cabo una audiencia crucial en Carolina, Puerto Rico.
La pareja, que ha estado junta casi 30 años, ha enfrentado una «ruptura irreparable». Este término legal indica que las diferencias son tan grandes que no hay vuelta atrás. La jueza Eva S. Soto Castelló ha dejado claro que este caso será confidencial, sin espacio para el circo mediático. La audiencia está programada para las 10:00 a.m., donde se presentarán testimonios y documentos relevantes para el caso.
El 2 de diciembre de 2024, Daddy Yankee confirmó públicamente su separación. En un emotivo mensaje, explicó que había intentado salvar su matrimonio durante meses. La pareja tiene dos hijos, Jeremy y Jesaaelys, quienes están en el centro de esta situación complicada.
Además del divorcio, hay otra batalla legal en juego: el control de las empresas que construyeron juntos, como El Cartel Records y Los Cangris. Daddy Yankee ha demandado a Mireddys por desviar alrededor de 100 millones de dólares a cuentas personales sin su autorización. Esto añade una capa extra de tensión al proceso ya complicado del divorcio.
Ambos tienen representación legal sólida. Daddy Yankee cuenta con la abogada Heileene P. Colberg Birriel, mientras que Mireddys tiene a Pilar Pérez Rojas en su esquina. Según expertos legales, es posible que tanto el divorcio como la división de bienes se resuelvan en la misma audiencia.