El pasado lunes 9 de diciembre, la actriz venezolana Grace Trocell protagonizó el espectáculo «Sci-Prov: A Time-Traveler”s Dilemma» en el reconocido local Caveat, en Nueva York. La obra, una combinación única de comedia, ciencia ficción e improvisación, logró un éxito rotundo en la venta de entradas, consolidándose como uno de los eventos más destacados de la temporada.
Trocell interpretó a una neoyorquina que renta un apartamento, en busca de un compañero de piso para compartir su hogar, ya habitado por un viajero en el tiempo varado en la actualidad. La trama, se desarrolló en torno a las entrevistas a diversos candidatos para ocupar la habitación. La actriz demostró su maestría histriónica al combinar comedia e improvisación, integrando ideas escritas por la audiencia en tiempo real, lo que añadió frescura y dinamismo al espectáculo.
Eduardo, conocido en sus redes como Mars: Crimson Frontier, encarnó al viajero con una actuación impecable, mezcla de inocencia y comicidad. Su interpretación, llena de matices, complementó a la perfección el trabajo de Trocell. Ambos lograron que la rutina, cargada de ingenio y humor, tuviera el potencial de rivalizar con las sitcoms más populares de Nueva York, dejando en el aire la posibilidad de que este concepto llegue a plataformas de streaming como Netflix o Disney Plus.
El espectáculo también contó con la participación de Amelia Rodriguez, Nina Jackson, Jhonatan Zapata y Jonathan Hatala, quienes representaron a los postulantes para la habitación, generando situaciones hilarantes que arrancaron carcajadas de principio a fin. La primera parte del show se centró en la búsqueda del nuevo ocupante, mientras que la segunda introdujo a los grupos de improvisación teatral Grupo de Improc Woodstock y Grupo de Musical Improv Unheardof, quienes aportaron su estilo único a la narrativa del espectáculo.
Para Grace Trocell, esta presentación marcó un reto significativo, tanto como actriz como productora. En sus propias palabras, “representó un salto de fe”, ya que la improvisación está lejos de ser su zona de confort. Además, realizar este tipo de espectáculo en inglés, un idioma que no es su lengua materna, agregó una presión extra. Sin embargo, Trocell describe la experiencia como una «linda victoria» y un punto de partida para más historias en Nueva York.
Al reflexionar sobre su regreso al escenario, Trocell expresó sentirse como si fuera su primera vez, pero también como si nunca se hubiera ido. “El escenario para mí es un lugar sagrado, y se siente muy lindo poder ser vulnerable sobre las tablas una vez más”, comentó emocionada.
La magia del espectáculo no solo radicó en su ejecución impecable, sino también en el espíritu colaborativo de los artistas que llenaron el espacio con creatividad y talento. Para Grace, esta experiencia reafirma su pasión por la actuación y su compromiso con seguir creando.