La escena musical venezolana ha recibido un duro golpe. A pocos días de su cuarta edición, el Cúsica Fest y la gira de cierre de Rawayana, «¿Quién trae las cornetas?», han sido abruptamente cancelados.
«Por causas ajenas a nuestra voluntad…», anunció Cúsica en sus redes sociales, dejando a muchos fans y músicos consternados. La gira de Rawayana, que prometía recorrer varias ciudades del país, también fue cancelada, a pesar de los esfuerzos de los organizadores.
¿Qué hay detrás de estas cancelaciones?
Si bien los organizadores han sido cautos al hablar de las razones, muchos apuntan a la fuerte crítica de Nicolás Maduro a la canción «Veneka» de Rawayana. El mandatario acusó a la banda de utilizar un término ofensivo para referirse a las mujeres venezolanas.
«Salgamos en defensa de la identidad de la mujer venezolana», expresó Maduro. Estas declaraciones generaron una ola de incertidumbre y presión sobre la banda y los organizadores de los conciertos.
«Nuestra música no está hecha para dividir«, respondió Rawayana en redes sociales, lamentando la cancelación de su gira. A su vez, anunciaron que se despiden de su país hasta nuevo aviso.
Más allá de una canción
Sin embargo, la situación trasciende el ámbito musical. Se considera que estas cancelaciones son una muestra más de la creciente censura y persecución a quienes disienten del gobierno. La relación de Rawayana con figuras de la oposición como María Corina Machado y Edmundo González Urrutia ha sido señalada como un posible motivo de represalias.
El Cúsica Fest, un evento que se había convertido en un referente de la música venezolana, también ha sido víctima de este contexto adverso. La cancelación del festival es un duro golpe para la industria musical y para todos aquellos que esperaban disfrutar de este evento.