Oskarovsky Boyer está brillando por tercer año consecutivo como maquillador oficial del certamen de Miss Universo, un evento que reúne a las mujeres más bellas de todo el mundo y se ha consolidado como uno de los concursos de belleza más importantes a nivel global. Su talento y dedicación han sido clave para resaltar la belleza de las candidatas, capturando la esencia y personalidad de cada participante.
En sus propias palabras, Boyer describe su experiencia en el certamen: “Llegar a la 73 edición del Miss Universo es como hacer un viaje por una vuelta al mundo. Es reconocer, entre todos estos rostros, la diversidad de nuestro universo. Es belleza, son historias, es cultura. Pero realmente significa algo más profundo…y es que mi propósito aquí no es solo maquillar. Mi propósito es enaltecer el don que poseo en mis manos y promover al máximo mi profesión”. Este enfoque no solo refleja su compromiso con su arte, sino también su deseo de celebrar la diversidad y las historias únicas que cada candidata representa.
La participación de Oskarovsky en el concurso no solo destaca su habilidad técnica en el maquillaje, sino también su capacidad para trabajar bajo presión en un entorno tan competitivo y de alto perfil. Cada rostro que se presenta en la competencia es para él un símbolo de riqueza cultural y belleza diversa, lo que añade un significado especial a su labor.
Boyer ha demostrado que su conexión con la belleza va más allá del simple acto de maquillar; se trata de contar historias a través del arte del maquillaje. En un evento tan significativo como el Miss Universo, su trabajo se convierte en una celebración de la diversidad y la cultura global.
Con su participación en este certamen, Oskarovsky Boyer no solo reafirma su posición como un destacado profesional en el mundo del maquillaje, sino que también inspira a otros a seguir sus pasos y a valorar la importancia de la diversidad y la autenticidad en todas sus formas.