Entre detenciones, incautación de evidencia y el paradero desconocido de Diddy, este caso sacude al mundo del espectáculo.
Agentes catearon su casa en LA y un domicilio en Miami como parte de una indagatoria iniciada en NY. King y Justin fueron esposados pero liberados horas después. Este fue el reporte de la policía para la prensa: “Hoy temprano, Investigaciones de Seguridad Nacional de Nueva York ejecutó acciones policiales como parte de una investigación en curso, como la asistencia de HSI Los Ángeles, HSI Miami y nuestros socios locales encargados de hacer cumplir la ley”.
Mientras, el paradero de P. Diddy generaba interrogantes luego de su avistamiento en un aeropuerto de Miami en Opa-Locka. Con pruebas en manos, continuará la pesquisa federal. Mientras tanto, la defensa del artista indicó: «Ayer, hubo un uso excesivo de la fuerza a un nivel militar mientras se ejecutaban las órdenes de registro en las residencias del Sr. Combs. No hay excusa para la excesiva demostración de fuerza y hostilidad exhibida por las autoridades o la forma en que sus hijos y empleados fueron tratados».
Y añade: «El Sr. Combs nunca fue detenido, sino que habló con las autoridades y cooperó con ellas. A pesar de las especulaciones de los medios, ni el Sr. Combs ni ninguno de los miembros de su familia han sido detenidos ni se ha restringido en modo alguno su capacidad para viajar».
Dyer subraya: «No ha habido ningún hallazgo de responsabilidad penal o civil en ninguna de estas acusaciones. El Sr. Combs es inocente y seguirá luchando cada día por limpiar su nombre».
Durante el allanamiento se dejó ver que los agentes policiales se centraron en los aparatos electrónicos, y en los discos duros de Diddy.
Un escándalo de grandes proporciones que involucra a una de las figuras más influyentes del hip hop. Solo queda aguardar resultados y si las acusaciones por abuso llegarán a instancias legales.