Luego de subastarse objetos personales del cantante el año pasado, su ex Mary Austin decidió poner a la venta la imponente mansión Garden Lodge en Londres donde Freddie vivió.
Ubicada en el exclusivo barrio londinense de Kensington, la propiedad de estilo georgiano data del siglo XIX y consta de ocho lujosas habitaciones distribuidas en dos plantas.
Mercury adquirió la vivienda en 1980 tras el consejo de Austin y no escatimó en remodelarla según su gusto, en particular su dormitorio principal donde instaló un sofisticado sistema de iluminación sobre la cama de la habitación.
Austin, pareja de Freddie entre 1970 y 1976, recibió la casa como parte de su herencia y ha velado por proteger el legado que en ella dejó el ícono musical. Pese al dolor que le causa desprenderse de un lugar cargado de recuerdos, quiere asegurar su debida preservación.
Al limitarse solo a enviar dos fotos internas y entrevistar personalmente a posibles compradores solventes, se busca dar privacidad a quien adquiera este tesoro y evitar que nuevos tributos de fans afecten la fachada.
Ahora la fastuosa residencia espera a quien desee habitar un pedazo de historia, en una vivienda testigo del genio creativo de Freddie Mercury en su etapa final.