60 años después de su estreno, la Junta Británica de Clasificación aumentó la edad permitida para ver Mary Poppins en el Reino Unido debido al uso de un término ofensivo.
En una investigación, la BBFC detectó que el personaje del Almirante Boom se refiere en una ocasión a personas con un término considerado despectivo para los khoikhoi. Ante la posibilidad de que los niños lo oigan y repitan sin darse cuenta, pasó de U a necesitar supervisión parental. La polémica estalló entre quienes ven censura y los que apoyan proteger a la infancia de contenidos dañinos.
Pero, ¿qué palabra encendió las alarmas en el Reino Unido? Fue nada más y nada menos que «hotentote», un término utilizado por los colonos holandeses para referirse a este grupo étnico del sur de África. El cambio afecta solo a la versión cinematográfica y podría llevar a revisar otros clásicos donde se hayan detectado términos similares.
El debate queda servido sobre hasta qué punto es viable modificar obras del pasado según los valores actuales y dónde hay que poner el límite entre proteger a los menores y censurar la historia.