Jay-Z causó polémica en los Grammy 2024 al arremeter contra los criterios de los premios y señalar que Beyoncé, presente entre el público, fue injustamente desairada en múltiples ocasiones.
Acompañado por su hija Blue Ivy, el cantante insinuó que algunos candidatos «no merecían la nominación» y criticó que Beyoncé, con más gramófonos que nadie, nunca ganara Álbum del Año, dejando en evidencia los déficits de los galardones.
Sus palabras incomodaron a la diva del pop, cuya reacción se hizo viral, y sus pullas a la Academia caldearon el ambiente de una noche donde también se detuvo al rapero Killer Mike luego de recibir tres premios.