Lo que sucedió con el estreno de The Flash es algo que será recordado por años, analizando lo que bien puede ser considerado como uno de los pasajes más complicados, densos y malogrados en la historia del cine.
Partiendo desde la propia controversia y daño colateral detonado por su estrella Ezra Miller hasta lo que sucedió con la post-producción de la cinta.
Todo mundo sabíamos que el estreno de The Flash iba a ser complicado, los rumores de un fracaso inminente crecieron conforme se incrementaban los reportes de cambios de último minuto a la historia y toneladas de re-filmaciones que inflaron aún más el costo de producción de la cinta.
Pero la realidad es que nadie estaba preparado para dimensionar la magnitud real del problema hasta que Warner estrenó finalmente la cinta. En donde se implementó una estrategia un tanto confusa, con funciones exclusivas semanas antes de la fecha general de estreno, para que influencers y periodistas comenzaran a hablar del filme.
En estas funciones se aseguraba que se trataba de la versión final pero sin los efectos digitales terminados, lo que terminó siendo un factor de peso para las primeras reseñas positivas que omitieron el detalle de su cuestionable CGI.
Grande fue la sorpresa de todos los que vieron la cinta primero que nadie cuando en la segunda vuelta comprobaron que lo que vieron en aquella primera función era virtualmente lo mismo sin pulir demasiados aspectos.
La recaudación en taquilla cayó en picada, la cinta se filtró completo en Twitter y sucedió lo que para muchos ya se veía venir.
Después de tres semanas en los cines The Flash se ha convertido en el peor fracaso de taquilla en la historia de las películas de superhéroes, luego de sufrir la peor caída en los ingresos de taquilla de la primera a la segunda semana en la historia de DC, con una contracción del 72,5%.
Se estima que para para este segundo fin de semana de julio de 2023 la cinta habría recaudado poco más de USD $250 millones a nivel mundial. Pero la cinta tuvo un presupuesto aproximado de USD $220 millones.
A lo que se le suma un presupuesto promocional adicional por USD $150 millones. Por lo que es más que probable que la película represente una pérdida por más de USD $200 millones para Warner Bros.
La distribuidora y productora ha retirado de las salas de cine muchas de las funciones reservadas para la película y ahora se ha filtrado que su estreno para plataformas digitales iniciaría este 18 de julio de 2023.
Primero se podrá comprar o rentar en formato digital en plataformas de este tipo y luego más adelante llegaría a HBO Max gratis para suscriptores.
Esto, sobra decir, sería la mayor pérdida financiera sufrida por cualquier estudio que haya financiado una película de superhéroes en la historia.