Ya han pasado más de dos años desde que el príncipe Harry y su esposa, Meghan Markle, tomaron la decisión de tomar rumbos diferentes y de alguna manera desligarse de la familia real de Inglaterra; no obstante, como miembro de la monarquía no podía perderse la coronación de su padre, el ahora rey Carlos III.
Esta sería la primera vez que Harry se reúne con su familia, tras el lanzamiento de sus memorias «Spare».
El duque de Sussex estuvo entre el primer grupo de miembros de la realeza en ingresar a la Abadía de Westminster, llegando junto a sus tíos, el príncipe Eduardo y el príncipe Andrés, y dos de sus primas, la princesa Beatriz y la princesa Eugenia. Harry se sentó con Andrew, su tío, en la tercera fila del servicio. Ambos son miembros de la realeza que no trabajan y no desempeñaron ninguna función durante la ceremonia.
La historiadora real de CNN, Kate Williams, describió previamente la aparición de Harry en la coronación como una “visita rápida”. “[El príncipe Harry] vendrá para este gran evento de la coronación de su padre, pero no será una reunión familiar. No vamos a ver muchas reuniones familiares grandes. Ciertamente, se ha hecho daño”, explicó.
Williams agregó que la presencia de Harry fue una “muestra de unidad”, pero el alcance de esa unidad aún está por verse.
El príncipe Harry no apareció con los miembros de la familia real para saludar al público desde el balcón del Palacio de Buckingham. CNN aseguró que el príncipe Harry no recibió una invitación para unirse a la familia para este momento.