Viviana Gibelli publicó a través de Youtube una serie de entrevistas al actor Rolando Padilla, de las cuales una fue junto a sus dos hijas biológicas, quienes se vieron obligadas a vivir varios años en Perú.
Alessadra y Andrea Padilla, hijas del protagonista de Voltea pa’ que te enamores, ya se encuentran en Venezuela con el actor, después de años de una forzada y dolorosa separación.
La situaciónen Perú fue tan dura que Alessandra tuvo que ponerse a trabajar en la calle debido a la escasez en casa. «No comíamos bien, fue un proceso difícil hasta que le dije a mi mamá que quería vender en la calle… Eso se alargó porque yo ya no quería, uno el acoso, dos que me paraba a las 6, iba ala colegio, salía a la 1, estaba de 1 a 10 en la calle vendiendo y llegaba a la casa a hacer más dulces», reza su desolador testimonio.
A ella se sumó su hermana Andrea, quien también salía a trabajar en la venta ambulante. Por mucho que insistieron a su madre de no hacerlo más, ella no se lo permitió. Hasta que llegó la pandemia y eso les obligó a quedarse en casa. «Es lo que agradezco de ese encierro (la pandemia)».
Esto no fue lo peor, Alessandra incluso llegó a confirmar que su madre le llegó a dar patillas. «Mi mamá me metía pastillas en la comida, me drogó y se siente horrible», prosiguió ante su padre en esta entrevista, quien no pudo contener las lágrimas al escucharla.
La madre de Andrea y Alessandra no solo tenía un problema de adicción a las pastillas, sino que sufría de un grave trastorno mental que fue a más y nunca trató. Las consecuencias de no ponerse en manos de profesionales a tiempo las pagaron, además de ella, sus dos hijas con Rolando.
Mientras tanto, el actor, quien no paró de luchar por ellas, pasó años «golpeadísimo», porque estaban en una situación de sufrimiento y porque su madre manipulaba a sus hijas para que no quisieran saber nada de su padre. Aunque él trató de contactarlas de todas las maneras posible, su expareja era quien le contestaba pasándose por ellas en las redes.
Rolando encontró el amor con la actriz Flavia Gleske, quien le permitió mudarse con ella y sus dos hijos. Ahora los actores viven en una sola casa con todos sus retoños.