La 95ta entrega de los premios Oscar ha sido una de las mejores galas de moda en los últimos años, sin emabrgo una cantante fue acusada de «grosera» por llevar un enorme tocado que obstruía la visión de quienes tuvieron la mala fortuna de sentarse detrás suyo en el Dolby Theater, sede de la ceremonia.
La cantautora TEMS, de 27 años, fue quien encabezó la polémica gracias a su enorme vestido strapless color blanco hecho de tul con un tocado de la misma tela y que envolvía sus hombros y cabeza como si fuera una nube.
La artista acudió a la ceremonia en calidad de nominada a la estatuilla dorada como autora del «Lift Me Up», que realizó en colaboración con la cantante Rihanna, para la cinta Black Panther: Wakanda Forever.
«Qué falta de respeto», comentó un usuario de Twitter en la plataforma. «El vestido es bello, pero poco práctico para un miembro de la audiencia, quien forma parte de la experiencia compartida», reflexionó alguien más. «Ser considerado es ser cortés».