Alex Bruz, es un tatuador venezolano cuyo estudio se ha convertido en un lugar al cual las personas acuden en busca de un servicio lleno de confort, calidad profesional en cuanto a tatuaje, y una variedad de estilos. Gracias a su talento, lo invitaron como juez para la Milano Tattoo Convention, convirtiéndose en el primer venezolano en evaluar en esta convención.
A este evento asisten más de 500 tatuadores de todo el mundo y el hecho de que Bruz haya sido escogido como juez para dicho evento significa un honor y orgullo, según indica el tatuador. Cuando se le preguntó cómo había logrado ser juez del evento, comentó que no fue algo que propuso de su parte, sino que fue otorgado por mérito.
“¡Fue justo el primer día del evento cuando los organizadores se acercaron a mi stand y me preguntaron si quería ser el jurado del día! Mi reacción fue de sorpresa totalmente porque no me lo esperaba, de hecho, estaba haciendo un tatuaje para competir, que es lo que hago normalmente cuando no soy jurado”, explica Bruz.
El venezolano comenta que tiene una carrera extensa como jurado en otros eventos y diferentes países, pero en Milano solo había asistido como expositor. Para su sorpresa, le pidieron ser jurado de un evento que para él es la mejor convención de tatuajes en el mundo.
“En ese evento asisten alrededor de 500 tatuadores de todo el mundo, los mejores de los mejores, y que tengas esa responsabilidad de evaluar a artistas que incluso uno admira es una responsabilidad única. A su vez me llena de alegría siempre representar a mi país Venezuela a donde voy”, indica Alex Bruz.
En cuanto a qué factores considera como jurado al momento de escoger al ganador, Bruz revela que se fija mucho en la técnica. “La técnica debe ser limpia, con una inyección sólida, pensando en cómo se verá a futuro ya cicatrizado, que no tenga maltrato en la ejecución, ya que estar maltratado significa que cicatrizaría mal o en su defecto se puede infectar de no tener una buena asepsia”, explica el profesional.
De igual forma, comenta que como parte de sus criterios personales, evalúa el diseño original dependiendo de la categoría –debe ser de su autoría y no plagio de otros artistas– y la composición. En cuanto al evento, Bruz expresa que le gusta que cada jurado tenga su hoja para puntuar a cada expositor de manera individual.
“Al final solo debes sumar y obviamente el que obtenga más puntos es el claro ganador sin debatir mucho. Me parece un formato excelente que solo he visto en dicho evento”, agrega.
Poder participar en la Milano Tattoo Convention como jurado también le dio la oportunidad de evaluar con más detalle las nuevas tendencias en el mundo del tatuaje. En opinión del profesional, el tatuaje es una de las vocaciones que sigue evolucionando en la parte artística y en la parte tecnológica.
Con respecto a las tendencias artísticas; a Alex Bruz le parece excelente que sigan apareciendo nuevos estilos y que cada artista le dé su toque personal. “Bien sea realismo, neotradicional, blackwork, lettering, color, etc. Lo importante es hacer de esa tendencia tu estilo y marca propia”, afirma Bruz.
El venezolano también comenta que hay una diferencia marcada; entre cómo tatúan los europeos, americanos y los latinos en cuanto al uso de la luz y el color. Según Alex Bruz, los latinos usan mucho la luz de la piel como punto de luz más alto en el diseño; mientras que los europeos y americanos trabajan saturando más al tope y luego resaltan los brillos con la tinta blanca. “Me he dado cuenta que se trabaja totalmente distinto, lo cual no está mal, es simplemente dos formas de tatuar diferente”, concluye Bruz.