Una reciente entrevista, volvió a despertar una de la pesadillas más dolorosas en la vida de Yuridia.
Una periodista de Ventaneando compartió por qué la cantante la vetó a ella y su programa hace años. Aseguraba que en su set habían comentado la excesiva subida de peso de la artista y esto dolió especialmente a la afectada, quien no entendió que su físico, en vez de su voz y talento, fueran tema de conversación.
El hecho de elegir no estar en ese programa más ni darles entrevistas tras el daño sufrido por los innecesarios comentarios en el show, fue el comienzo de una de las «etapas más oscuras de mi vida», aseguró mucho más consciente y con el control de lo que pasó.
Yuridia decidió así romper el silencio y hablar por primera vez de la persecución y el acoso sufrido en esa época y los pensamientos que cruzaron su mente ante tanto dolor.
«La gordofobia y el body shaming antes era supernormal y de hecho me sorprende mucho que en el 2023 ella esté hablando de este tema de la forma más tranquila. El problema aquí es que hicieron una campaña de desprestigio y eso se sabe. Hasta la fecha no sé por qué hicieron esta campaña de desprestigio, no sé si tenían a alguien más en la mira que querían apoyar más o simplemente es que yo era lo suficientemente manipulable para la empresa», arrancó su fuerte testimonio a través de su cuenta de TikTok.
Yuridia relató las consecuencias que tuvo en su vida y la de su familia el no ceder. «La forma de ellos querer ponerme en mi lugar fue muy devastadora… Perseguían a mis hermanitos a la escuela, ellos tenían 5 y 7 años, los maltrataban física y verbalmente, vandalizaban mi casa, les tiraban huevos, rompían las ventanas, escupían en el buzón, me ponchaban las llantas del carro, me perseguían en los carros», describió visiblemente emocionada.
Yuridia tenía 18 años cuando todo esto comenzó y tuvo un efecto demoledor en su vida. Tal es así que hubo un momento en que tuvo feos pensamientos. «Contemple morirme, pensé que dejar de existir era lo mejor», dijo.
Una situación sumamente dolorosa que, aunque ha quedado atrás, dejó un cicatriz que todavía, al tocarla, se siente. El pesar de Yuridia es que no se hagan cargo de su parte de responsabilidad. «Siempre van a preferir echar la culpa a alguien por ser débil. En fin, qué bueno que ahora tengo TikTok para poder hablar, pues, sin ediciones, ¿verdad?».
«Si yo trato de no dar entrevistas a ciertos medios de comunicación no es por berrinche o porque hablen de mi cuerpo, ¡es porque casi me matan! Y porque se toman muy a la ligera las cosas que dicen», continuó asegurando el poder de los programas en influenciar en las personas de la calle que, en su caso, llegaban a ella y la insultaban.