El cocreador de The Last of Us, Neil Druckmann, y el showrunner de la serie, Craig Mazin, explican las inspiraciones del mundo real detrás de la nueva incorporación de la serie de HBO de víctimas de la infección por Cordyceps conectadas químicamente. La serie es una adaptación del aclamado juego de acción y aventura de Naughty Dog de 2013 ambientado en una América desolada y postapocalíptica. En The Last of Us, la humanidad se ve repentinamente asolada por una epidemia en 2003 causada por una cepa mutada del hongo Cordyceps, que convierte a sus víctimas en criaturas feroces y voraces y acaba con gran parte de la civilización. La infección obliga a los supervivientes del brote a retirarse a zonas de cuarentena aisladas mientras la civilización se desmorona, o a formar grupos tribales más pequeños para sobrevivir en el duro nuevo mundo.
Tras el desgarrador episodio 2 de The Last of Us, Druckmann y Mazin desgranaron muchos aspectos de la escritura y la producción de la serie como parte de la serie de HBO Max The Last of Us | Inside the Episode en YouTube.
Al hablar de la conexión química entre las víctimas de la infección por Cordyceps, Druckmann reveló que el hecho de que los infectados compartan una conexión similar a la de los hongos reales fue un añadido de Mazin a la historia ya establecida del juego. El showrunner explicó entonces que se había inspirado en las redes micorrícicas que utilizan las plantas y los hongos, conocidas como Wood Wide Web:
«Neil Druckmann: Craig tuvo esta idea que me encantó, que es como la forma en que funcionan los hongos, a veces son como los organismos más grandes que podrías tener en el bosque. Es un único organismo que puede comunicarse con diferentes partes del mismo. Es como, si tocas un zarcillo aquí, a una milla de distancia, podrías despertar una horda de infectados que ahora, como, vendrán tras de ti.
Craig Mazin: De hecho, hay una cosa llamada la Wood Wide Web. Los hongos pueden comunicarse químicamente a distancias insanas. Son organismos extraordinarios, y por desgracia, en este caso, también aterradores.»