Fantastic Beasts: Los Secretos de Dumbledore se ha estrenado y los fanáticos están desanimados por la controversia que rodea a gran parte de la película y a la franquicia en su conjunto o simplemente no están interesados en acudir a los cines. ¿Por qué? Pues porque la película sigue estando en el punto más bajo de la serie. A pesar de ser el título internacional número 1 por tercer fin de semana consecutivo con 38,3 millones de dólares en 24.617 pantallas y en 67 mercados extranjeros, todavía no ha alcanzado el nivel de éxito que tienen las anteriores películas de la serie Fantastic Beasts and Where to Find Them.
Bestias Fantásticas: Los secretos de Dumbledore obtuvo una taquilla IMAX global de 3,4 millones de dólares en el tercer fin de semana, lo que eleva su total a 18,7 millones de dólares. Norteamérica contribuyó con 1,6 millones de dólares en la taquilla IMAX, lo que eleva la suma nacional de IMAX a 6,7 millones de dólares, mientras que las cifras internacionales de IMAX fueron de 1,8 millones de dólares y elevaron el total internacional a 12 millones de dólares.
No es realmente sorprendente por varias razones. Aparte de los típicos factores COVID que influyen en los bajos totales de taquilla, la tercera película de Fantastic Beasts and Where to Find Them también estuvo plagada de una serie de razones por las que los fans no querían apoyar. La serie, en su conjunto, está sufriendo el ataque en línea de la creadora J.K. Rowling a la comunidad trans y su desprecio a las mujeres trans.
Rowling, aunque es una de las principales fuentes del malestar y con razón, no es la única razón por la que los fans no están entusiasmados con el Wizarding World y, particularmente, con esta película. La película también está protagonizada por Ezra Miller, el actor que también es Barry Allen en la próxima película The Flash, y recientemente han sido arrestados en Hawai.
Esta película también supone un cambio de serie para la franquicia, ya que la anterior estrella, Johnny Depp, fue sustituida por Mads Mikkelsen en Los secretos de Dumbledore, lo que habría sido un atractivo para los fans de Mikkelsen, pero junto con todo lo demás en contra, la película no ha visto los resultados de taquilla que tuvieron las otras películas.
Lo que todo esto significa para el futuro de la franquicia de Harry Potter y el mundo que creó Rowling está en el aire. Una taquilla baja para algo como esto, que solía ser una atracción para las salas de cine, muestra que hay un cambio en lo que el público está dispuesto a desembolsar dinero y, ya sea por la controversia que rodea a la película o por otros factores, parece que Bestias Fantásticas: Los secretos de Dumbledore es una caída para la serie.