Lo que inició siendo un «acto de discriminación y homofobia» ha dado un vuelco inimaginable. La medallista olímpica, Stefany Hernández, se pronunció por redes sociales para contar que el pasado 12 de marzo había sido víctima del equipo de seguridad de Narciso Bar Club, discoteca ubicada en Caracas.
No obstante, los videos de las cámaras de seguridad del local se han hecho virales en redes y es así como las imágenes desmienten que haya sido discriminada por «no llevar mini falda, cabelllo liso o tacones rojos». Según relatos de personas que se encontraban en los espacios del bar esa noche, cuentan que Hernández y su grupo de amigos se pasaron de copas y tomaron acciones algo desagradables; «tiraban hielos, tragos y empujaban a quienes habíamos ido a disfrutar de la noche».
Un sinfín de criticas le cayeron encima a la deportista, además otros tanto exigen la liberación del vigilante que se encontraba haciendo su trabajo el pasado sábado. Sin embargo, la única respuesta que se ha hecho pública ha sido la de Stefany, quien se volvió a pronunciar para dar una nueva versión, pidiendo calma y sin hacer referencia al señor que se encuentra detenido.
Ahora, llegó la «cereza que le faltaba al pastel» y es que, una de las amigas de Stefany Hernández de esa noche, sería Dubraska Moreno, la esposa del gobernador del estado Miranda, Héctor Rodríguez.
Como era de esperarse, este detalle generó más y más comentarios por parte de los internautas, quienes califican toda la situación como un «show» y algunos se responden todas las dudas por tratarse de «enchufados» y «apadrinados».
«Cuando las personas están #APADRINADAS se creen los dueños del mundo y esté caso es el vivo reflejo de ello»; «Con razón está preso el pana… Ya entiendo todo»; «Con razón está preso el vigilante»; «Que injusticia con el vigilante»; «Ahora menos para que dejen libre al Señor de seguridad», son algunos de los comentarios que han tomado fuerza en redes.