Mientras que la expectación por la miniserie de Netflix, Inventing Anna, es grande, la persona que inspiró toda la serie, Anna Sorokin (también conocida como Anna Delvey), podrá ver el proyecto ya que permanece bajo custodia del ICE. Inventing Anna es una miniserie dramática que investigará el caso real de Delvey, una infame estafadora que robó millones a las élites de Nueva York. La serie se estrenará en Netflix el 11 de febrero de 2022. La estrella de Ozark, Julia Garner, interpretará a Delvey en la serie y estará acompañada por los miembros del reparto Anna Chlumsky, Anna Deavere Smith, Anders Holm y Katie Lowes.
Dirigida por Shonda Rimes, Inventing Anna se basa en el artículo «How Anna Delvey Tricked New York’s Party People» de Jessica Pressler. Profundiza en el ascenso y la caída de Sorokin, que se hizo pasar por una multimillonaria heredera alemana llamada Delvey para robar millones. Tras hacerse pasar por una heredera alemana y estafar dinero a la élite de la sociedad neoyorquina, las mentiras de Delvey la atraparon, lo que llevó a su detención y condena por ocho cargos de hurto y robo. La infame estafadora fue condenada a entre 4 y 12 años de prisión y fue liberada en febrero de 2021. Sin embargo, debido a que sobrepasó su visado, fue rápidamente puesta bajo custodia del ICE, donde permanece en la actualidad.
En un ensayo publicado por Insider, Delvey se sinceró sobre por qué no verá Inventing Anna. Delvey explicó que mientras el mundo ve la versión ficticia de Garner sobre la vida de Delvey, ella sigue sentada en una celda de la cárcel del condado de Orange. A pesar de que la extensión de su visado está fuera de su control, sigue detenida, sin un camino claro hacia la liberación. Aunque Delvey recibió la visita de Garner durante su estancia en la cárcel y aunque siente curiosidad por la forma en que Inventing Anna aborda su historia, simplemente «no puede evitar sentirse como algo secundario». Inventing Anna puede contar su historia, pero no muestra la continuación de su vida bajo la custodia del ICE. Mira su declaración a continuación:
Así que no, no parece que vaya a ver «Inventing Anna» en breve. Incluso si pudiera tirar de algunos hilos y hacer que suceda, nada de ver una versión ficticia de mí misma en este escenario de asilo de criminales insanos me parece atractivo. Durante mucho tiempo, esperaba que para cuando se estrenara «Inventing Anna», yo ya hubiera seguido con mi vida. Imaginaba que el espectáculo sería una especie de conclusión que resumiera y cerrara un largo capítulo que había llegado a su fin. Casi cuatro años de trabajo y horas de conversaciones telefónicas y visitas después, el espectáculo se basa en mi historia y se cuenta desde la perspectiva de un periodista. Y aunque tengo curiosidad por ver cómo interpretaron toda la investigación y los materiales proporcionados, no puedo evitar sentirme como una idea de última hora, la sombría ironía de estar confinado en una celda de otro horrible centro penitenciario se pierde entre las líneas, la historia se repite.
Delvey continúa en su ensayo pintando un cuadro bastante sombrío de cómo es su custodia en el ICE ante el aislamiento de COVID-19. Según Delvey, es la única mujer bajo custodia del ICE en toda la cárcel del Condado de Orange. Debido al aislamiento en cuarentena, pasa semanas sin que la dejen salir de su celda, que ella calificó de «placa de Petri para virus y bacterias». La cárcel carece de personal, y ella no ha visto a un médico de verdad en más de cuatro años. Delvey dijo que los espectadores de Inventing Anna tampoco podrán ver su nuevo hábito de morderse la piel alrededor de las uñas para tratar de pasar el tiempo en otro día de aislamiento.
La explicación de Delvey de por qué no verá Inventing Anna de Netflix es bastante comprensible. La serie recogerá su increíblemente verdadera historia de estafadora, pero no captará del todo dónde se encuentra ahora. Cuando la serie estaba en fase de desarrollo, Delvey pensó que para cuando se estrenara ya habría salido de la cárcel y habría seguido con su vida. Sin embargo, el hecho de sobrepasar su visado y su custodia con el ICE pusieron otra barrera a su liberación, incluso después de pagar su restitución y cumplir su sentencia de prisión. Naturalmente, Delvey no quiere ver Inventing Anna, sabiendo que su historia ficticia captará la atención de la sociedad, mientras que en la vida real permanece aparentemente olvidada en la custodia del ICE. Aunque el escándalo de Delvey sin duda cautivará a los espectadores de Inventing Anna, queda por ver cuánta atención atraerá su continua situación.