El actor de Deadpool, Ryan Reynolds, está dando un buen uso a su perfil público, recaudando cerca de un millón de dólares para la Fundación SickKids, que beneficia al Hospital para Niños Enfermos de Toronto, a través de una campaña de suéteres feos. Reynolds tuvo un 2021 muy ocupado, protagonizando El guardaespaldas de Hitman, Free Guy y Red Notice. Sin embargo, la estrella anunció a finales del año pasado que se tomará un descanso de la actuación durante un tiempo.
La campaña benéfica de Reynolds tiene una historia de origen inverosímil. La idea nació de una broma que le gastaron a la estrella Hugh Jackman y Jake Gyllenhaal. En 2018, ambos convencieron a Reynolds de que una función a la que asistía era una fiesta de jerseys feos. La foto resultante de Instagram, que se hizo algo viral, muestra a Jackman y Gyllenhaal riéndose en ropa de calle mientras Reynolds se interpone entre ellos, abatido y con un ridículo jersey rojo y verde adornado con un lazo dorado. «Estos f*cking a**holes dijeron que era una fiesta de suéteres», decía el pie de foto. Pero ahora parece que Reynolds está riendo el último, ya que ha convertido esa broma, y ese horrible jersey, en una causa benévola.
Desde la broma, el jersey se ha convertido en la marca no oficial de la campaña «Help Ryan Help SickKids», cuyos beneficios se destinan al hospital. Reynolds acudió a Instagram para anunciar el éxito de su iniciativa del jersey 2021, informando a sus seguidores de que había ayudado a recaudar más de 850.000 dólares para el hospital. El post, que muestra a un Reynolds con aspecto triunfal luciendo uno de los antiestéticos jerséis, da las gracias a Samsung Canadá, que donó 100.000 dólares a la causa, y a los Toronto Maple Leafs, que subastaron camisetas firmadas por jugadores para la campaña. Reynolds ha realizado campañas similares en el pasado. La de 2021 se centró especialmente en la adquisición de nuevos uniformes para el personal sanitario de primera línea del hospital. Consulta el post de Reynolds a continuación:
La larga guerra de bromas entre Reynolds y Jackman es de dominio público desde hace tiempo. Los dos han sido enemigos desde que coprotagonizaron la película de 2009 X-Men Orígenes: Lobezno, que presentaba por primera vez al Deadpool de Reynolds, aunque en una versión muy diferente a la que los espectadores conocen hoy. Las bromas siempre se hacen en broma, pero la broma del jersey feo de Jackman no sólo fue una historia divertida, sino que tuvo efectos duraderos y tangibles para el Hospital para Niños Enfermos.
La relación entre Reynolds y Jackson siempre es divertida. Ahora, gracias a la campaña del jersey feo de Ryan Reynolds, su amistosa rivalidad no sólo proporciona un entretenimiento sin fin, sino que también hace un bien al mundo. Cualquiera que quiera contribuir a la causa puede hacer una donación a SickKids.