El papel de Leonardo DiCaprio en Don’t Look Up como el astrónomo Dr. Randall Mindy marca la primera vez en una década que el actor ha protagonizado una película con críticas menos que estelares. Una posible excepción a esto es la película de Baz Luhrmann de 2013 El gran Gatsby, que actualmente tiene una puntuación de 48% en Rotten Tomatoes, aunque esto se contrae con una calificación general favorable del público. En cualquier caso, en los últimos diez años DiCaprio ha participado en películas ampliamente aclamadas de forma consecutiva. Su lista de películas incluye tanto Once Upon a Time In Hollywood (2019) como Django Unchained (2012), de Quentin Tarantino, su papel ganador del Oscar en The Revenant (2015) y The Wolf on Wall Street (2013).
Don’t Look Up prometía ser una buena película. El reparto incluye a Meryl Streep perfectamente encasillada en el papel de la presidenta Orlean de Don’t Look Up, Jennifer Lawrence como candidata al doctorado y compañera de facto de la doctora Mindy, y otros grandes nombres como Cate Blanchett, Jonah Hill, Timothée Chalamet, Tyler Perry y Ariana Grande. El guionista y director Adam McKay también tiene una impresionante filmografía que incluye The Big Short, Vice y el drama de HBO Succession.
Don’t Look Up sigue a DiCaprio y Lawrence después de que descubran un cometa «asesino de planetas» de varios kilómetros de ancho que se dirige hacia la Tierra con un 100% de posibilidades de impactar. Su misión: convencer a los políticos desinteresados, a los multimillonarios y al público en general para que frenen esta amenaza y salven el planeta. Como alegoría de la amenaza del cambio climático, la película transmite un mensaje ensordecedor sobre la corrupción del poder, el capitalismo, el culto a las celebridades y la división política.
A pesar de su atrevida premisa y de un reparto repleto de estrellas, las críticas mixtas de Don’t Look Up han hecho que la película se polarice irónicamente. Es cierto que la actuación de Leonardo DiCaprio en la película está muy bien hecha, pero muchas de las malas críticas consideran que está escrito como un arquetipo barato, uno que tal vez sea más adecuado para Will Ferrell que para el oscarizado DiCaprio. Sin embargo, la división de Don’t Look Up hace que muchas de las críticas parezcan especialmente subjetivas en función de la opinión de cada uno sobre el tema, sobre todo si se tiene en cuenta que las interpretaciones y los aspectos técnicos de la película han recibido prácticamente todos los elogios. En todo caso, el punto débil de No mires arriba es su intento de sátira excesivamente agresivo y pesado, algo que las últimas películas de DiCaprio no comparten.
Don’t Look Up es la primera película de DiCaprio basada en la actualidad desde Inception, de 2010, lo que afecta a la respuesta de la crítica de forma diferente a sus películas recientes. Su papel en Once Upon a Time in Hollywood como el envejecido actor Rick Dalton fue más un homenaje al Hollywood de 1969 que una crítica mordaz de cualquier tipo. Django Unchained, The Revenant y The Wolf of Wall Street también carecen del aspecto cercano que ofrece Don’t Look Up porque están basadas en el pasado. Don’t Look Up tiene críticas comprensibles, como su mensaje poco sutil y directo, que podría ser más profundo de lo que es, o la infrautilización de sus estrellas de primera fila. Por ejemplo, Chalamet es introducido en el último acto como un joven sucio y sin hogar que justifica los temores de Lawrence cuando DiCaprio sale de su historia y ya no puede cumplir ese propósito. No obstante, el hecho de que los personajes de Don’t Look Up estén basados en celebridades y las escenas en las que los ataques de pánico en los programas de entrevistas matinales se convierten en memes añaden un nivel agresivo de relevancia que los espectadores disfrutan o no.
A pesar de que Don’t Look Up tiene críticas negativas, es un testamento de su talento que DiCaprio pueda tener un currículum actoral tan impresionante e impoluto que abarca años. En una década, DiCaprio encajó en más películas ganadoras del Oscar que la mayoría de los actores en toda su carrera. El mensaje excesivamente asertivo de Don’t Look Up tal vez explique las críticas mixtas de la película, pero esto no desmerece la larga línea de trabajo general de DiCaprio.