La cantante y compositora Adele, ganadora del Grammy, hizo una rara aparición pública el pasado sábado por la noche al asistir al Juego 5 de las Finales de la NBA en Phoenix, Estados Unidos, donde pudo ver desde la cancha la acción entre los Phoenix Suns y los Milwaukee Bucks.
Adele sorprendió por su rejuvenecido rostro mientras vestía un conjunto muy glamoroso, tipo de ropa con la que no acostumbra a vestir. La cantante optó por un abrigo con estampado de animales, que combinó con un top negro y mallas, así como un par de tacones a juego. Además, complementó su atuendo con una variedad de joyas de oro y una mascarilla negra.
En un momento del juego, incluso se la vio sosteniendo una toalla naranja mientras animaba a los Suns, aunque el equipo terminó perdiendo ante los Bucks 123-119.
Miles de usuarios en redes sociales se sorprendieron de lo cambiada que luce la artista en comparación a sus inicios.