El creador de iCarly, Dan Schneider, se ha sincerado sobre su salida de Nickelodeon y ha negado las acusaciones de mala conducta. El productor trabajó para Nickelodeon durante tres décadas, entre 1988 y 2018. Fue el creador detrás de algunos de los favoritos del canal naranja de todos los tiempos, como Drake y Josh, iCarly, Zoey 101 y Victorious. Sin embargo, en 2018 Nickelodeon anunció que se había separado de Schneider.
Cuando Schneider dejó Nickelodeon, era uno de los productores de televisión infantil más exitosos. La reciente reposición de iCarly en Paramount+ revela la longevidad y el éxito de la creación de Schneider, de ahí que muchos especularan sobre su repentina salida. Los investigadores de Internet se lanzaron a las redes sociales para acusar al productor de conducta sexual inapropiada contra las jóvenes actrices de su programa. Recopilaron videos que mostraban fetiches de pies y supuestas insinuaciones sexuales en los programas de Nickelodeon o abrazos incómodos entre Schneider y sus actrices. La prueba más preocupante fue un Vine supuestamente publicado por la ex actriz de iCarly Jennette McCurdy, en el que decía: «Mira lo que me has hecho [Dan Schneider]».
Como informó Deadline, Schneider recientemente se abrió sobre su salida de Nickelodeon y respondió a las acusaciones de mala conducta. Schneider reiteró que no dejó Nickelodeon en malos términos. Su tiempo en Nickelodeon fue simplemente un tiempo agotador, y se fue para ponerse al día con las cosas que había descuidado durante sus décadas de trabajo. Negó cualquier acusación de mala conducta y afirmó que nunca actuó de forma inapropiada con ninguno de sus actores. Consulta su declaración a continuación:
«Me tomé un descanso para ocuparme de muchas cosas que había dejado de lado durante décadas… La comedia era totalmente inocente. No podría, y no tendría las amistades a largo plazo y la lealtad continuada de tanta gente reputada si hubiera maltratado a mis actores de cualquier edad, especialmente a los menores. Nunca me relacioné con los actores de ninguna manera, ni por mensajes de texto ni de otro tipo, que debiera incomodar a nadie».
Schneider sí se sometió a una investigación durante el auge del movimiento #MeToo por parte de la empresa matriz de Nickelodeon, ViacomCBS. La investigación no encontró pruebas sustanciales de mala conducta sexual, pero sí planteó algunas preocupaciones. Colegas de Schneider indicaron que era verbalmente abusivo en forma de rabietas y correos electrónicos enojados y que era propenso a enviar mensajes de texto a sus actores menores fuera de las horas de trabajo. Schneider no detalló la investigación, pero sí declaró que nunca se relacionó de forma inapropiada con ninguno de sus actores y que las acusaciones de abuso verbal eran simplemente el resultado de su alto nivel de exigencia. No tiene ningún desprecio hacia Nickelodeon y deseó «lo mejor» al reparto y al equipo de la reposición de iCarly.
La decisión de Schneider de hablar sorprendió a muchos después de sus años de silencio tras la salida de Nickelodeon en 2018. Su decisión podría haberse revelado en su entrevista, en la que dejó entrever su regreso a la industria televisiva con una nueva serie de televisión para adultos. Su regreso a la industria será ciertamente interesante, teniendo en cuenta las acusaciones y la investigación que le rodean. Aunque la investigación no sugiere nada demasiado nefasto, sí que apunta a un comportamiento cuestionable por parte de Schneider. En cuanto a las acusaciones más graves, nada puede probarse realmente a menos que uno de los actores menores hable.
Mientras que actores de Nickelodeon como Amanda Bynes y McCurdy de iCarly han revelado luchas con enfermedades mentales y desórdenes alimenticios, es mera especulación decir que Schneider es la causa. La industria de la actuación infantil en sí misma puede ser problemática y explotadora, ya que muchos actores infantiles luchan por superar sus experiencias como adultos. Sin embargo, cuando se trata de menores, acusaciones como éstas no pueden tomarse a la ligera. Tanto si las especulaciones son ciertas como si no lo son, es de esperar que se lleve a cabo una investigación exhaustiva antes de que Schneider haga su posible regreso a la industria.