Estamos ante un momento muy particular en la historia del cine. Por primera vez se tienen voces diversas creando contenido de manera constante ampliando las posibilidades de inclusión.
Por supuesto, todavía hay muchos obstáculos, malentendidos y resbalones en el proceso, pues no todos lo aceptan de manera natural, otros se quejan constantemente de que dicha inclusión no es perfecta o que se siente forzada, y otros más critican que todavía no sea tan evidente.
Las películas animadas son las que más causan la división entre el público, pues mucha gente todavía percibe a la comunidad LGBT como “un tema de adultos que no debe enseñarse a los niños”, y otros lo ven como una charla muy necesaria desde la infancia.
Algo que no hace este proceso nada sencillo es que las productoras suelen aprovecharse de las exigencias del público para entregarles falsa inclusión (¿cuántos live action de Disney han prometido el primer personaje LGBT de la marca?) dejando de lado aquellas historias que verdaderamente quieren tocar este tema de manera natural.
¿Debemos seguir interpretando ciertas tramas o por fin aceptaremos verlas de manera evidente en historias infantiles? Aunque Pixar es parte de Disney, todavía conserva su autonomía creativa y durante años ha puesto sobre la mesa temas serios de una manera atractiva para adultos y niños por igual.
Su más reciente título ya está dando mucho de qué hablar. De hecho, desde los primero avances algunos sospechaban que Luca (89%), dirigida por Enrico Casarosa, mostraba elementos suficientes para ser considerada LGBT.
Ahora que por fin se estrenó, y con un buen recibimiento de la crítica, no pasó mucho tiempo para que algunos expertos comenzaran a desentrañar el subtexto de la cinta para explicar cómo es que se trata de un despertar sexual y reconocimiento del amor entre dos niños y no una historia que simplemente habla de amistad inesperada e incondicional.
Luca fue comparada con Llámame Por Tu Nombre (97%), dirigida por Luca Guadagnino, pero Casarosa de inmediato dijo que su proyecto trataba simplemente de una amistad muy pura, antes de que la vida adulta y las parejas cambien la perspectiva que uno tiene para relacionarse con otros.
Por supuesto, su comentario fue ignorado por la crítica especializada que cree que es justo el subtexto homosexual lo que hace de Luca una película mucho más interesante y relevante de lo que puede parecer a primera vista.
En su reseña para Collider, el crítico Matt Goldberg analiza la cinta desde esta perspectiva y asegura que es la parte de Disney la que no permitió que la película fuera abiertamente LGBT para evitar la pérdida de dinero en taquilla por prejuicios a esta comunidad y a cualquier marca que la apoye.
El crítico explica: “Luca se convierte en algo especial con la relación entre Luca y Alberto. Por un lado puedes argumentar que la relación es suficientemente amplia como para abarcar a cualquiera que se sienta un forastero. Pero yo debatiría que la cinta no es una simple historia sobre ‘forasteros’, sino sobre personas que sienten la necesidad de hacerse pasar por algo que no son porque el mundo los percibirá como monstruos”
Goldberg incluso afirma que el subtexto es aún más claro porque Pixar decidió que los protagonistas fueran dos niños:
[Pixar] decidió hacerlos dos niños que se esconden del mundo, pero saben la verdad uno del otro. Cuando tienen una pelea y Alberto le grita a Luca sobre Giulia, “¿Qué pasará cuando ella te vea? ¿Cuándo cualquiera te vea?”, esta es una historia sobre dos personas tratando de resolver cómo pueden ser honestos consigo mismos en un mundo que rechaza la verdad. Y puedes ocultarte por un tiempo, pero en algún momento, para vivir tu vida plenamente, tienes que salir incluso si el mundo no está listo para manejarlo.
El crítico también asegura que Luca no es una película sólo sobre amigos, pues la amistad entre ambos no es como la de Buzz y Woody en Toy Story (100%), o Mike y Sully en Monsters, Inc. (96%), y que la única razón para no ser más abiertos al respecto es porque esta relación podría ser percibida como negativa por padres de familia conservadores y prejuiciosos.
Seguramente esta lectura será muy comentada en los próximos días, incluso años, al hablar de la cinta, donde algunos asegurarán que sí es sobre una relación gay y otros dirán que eso es sobreanalizar una obra con un tema bastante simple.