La liga de Justicia ha tenido un nuevo renacer y es gracias a Zack Snyder, el creador de este Universo Cinematográfico que pudo ser pero no fue. Llamado también como el Snyder Cut, esta nueva versión de cuatro horas, muestran escenas y personajes que no vimos en la primera versión mostrada en 2017 bajo la supervisión de Joss Whedon.
Si eres fiel fanático de DC y de todos los proyectos de Snyder, sabrás que este trabajo en específico guarda un valor sentimental para el cineasta, pues en los créditos, va una dedicatoria a una persona muy importante para él.
Antes de que empiecen los títulos de créditos finales, aparece en pantalla el siguiente mensaje: “Para Autumn”. Aquellos y aquellas que hayan seguido la historia detrás de las cámaras de este proyecto sabrán quién es la persona a la que va dedicada la película. Si por el contrario, no estás familiarizado con ella, te explicamos de quién se trata a continuación:
Autumn es la hija de Zack Snyder y de su primera mujer Denise Weber. El 12 de marzo de 2017, la joven de 20 años, que sufría depresión, se suicidó. El trágico suceso coincidió con la época en la que Snyder estaba rodando Liga de la Justicia. Por aquel entonces, Warner Bros. ya había perdido la confianza en el realizador tras las críticas recibidas por Batman v Superman: El amanecer de la justicia (2016) y el director tenía que pelear con el estudio por el control creativo de Liga de la Justicia. Tras la muerte de Autumn, Snyder decidió abandonar el proyecto cuando estaba en las etapas finales del rodaje.
“En mi mente, pensé que sería algo catártico volver al trabajo, enterrarme en él y ver si esa era la manera de superarlo”, afirmó el director en 2017 en THR, cuando se anunció su salida del proyecto. “Las demandas de este trabajo son muy intensas. Todo consume mucho. Y en los últimos meses, me he dado cuenta… He decidido dar un paso atrás y estar con mi familia, estar con mis hijos, que me necesitan de verdad. Todos lo están pasando mal. Yo lo estoy pasando mal”. Recientemente, el realizador reconoció en Vanity Fair que el fallecimiento de su hija le hizo perder su «voluntad de luchar».