¿Y si las cosas hubiesen sido distintas en las series Lucifer y Outalnder?, pues eso pudo haber pasado. Tom Ellis ha reconocido que pudo haber terminado actuando en la serie de Outlander y no Sam Heughan. Así lo dijo en una conversación que tuvo con el mismísimo Heughan para la revista Square Mile.
Ellis pudo haber interpretado a Frank Randall, el marido de Claire (Caitriona Balfe) al que interpretó Tobias Menzies. Entre risas, los dos actores han hablado sobre si trabajar juntos habría sido lo mejor para ambos.
«Lo primero, no estoy seguro de cómo habría sido tenerte [en el rodaje]”, confiesa Heughan, “Habría sido complicado, pero sé que lo habríamos pasado genial. En realidad, habrías sido brillante porque Frank Randall es encantador, un personaje adorable, y luego está Black Jack, el otro papel que habrías tenido que interpretar, es violento».
Heughan se refiere a John Randall, el antepasado de Frank Randall, capitán inglés que le pone las cosas muy difíciles a Jamie Fraser. Ambos personajes son completamente distintos y es una cualidad del papel de Menzies que podría haber encajado muy bien en Tom Ellis. «Es un gran papel. Tobias, por supuesto, hace un gran trabajo, pero habría sido muy diferente», señala Heughan.
Si Ellis hubiese acabado dando vida a Frank/John Randall nunca habría tenido la oportunidad de convertirse en Lucifer Morningstar, ya que el ritmo de trabajo del drama de Star no le hubiesen permitido rodar también los episodios de la ficción fantástica.
El actor de Outlander también ha señalado que, cuando empezaron a rodar el drama de época, nunca habría pensado que llegaría tan lejos. «Recuerdo el primer día que me llevaba mi conductor. Me preguntó: ‘¿Cuánto crees que va a durar?’ Y yo dije: ‘Dos años como máximo’. Ya vamos por nuestro octavo año y subiendo».
Tom Ellis también ha tenido oportunidad para hablar de su experiencia en Lucifer y reconoce que probablemente nunca va a tener un trabajo más intenso que la quinta temporada. «Interpreto a dos personajes y no puedo imaginar tener una agenda más apretada que ésta. Todo el día, todos los días durante meses. Estar en esa especie de rueda de hámster es un privilegio porque hay mucha gente que viene, está nerviosa y siente la presión de estar en cámara. Los actores invitados que vienen todo el tiempo o actores de reparto que trabajan una vez a la semana… Ellos sienten que cada momento cuenta, pero cuando estás siempre en el set, simplemente lo haces y lo vives. No piensas otras cosas».
Su compañero de profesión está de acuerdo y reconoce que Outlander también le ha ayudado a sentirse más cómodo en un set de rodaje. “Siempre me pongo nervioso cuando empiezo un nuevo trabajo, pero ahora es como ‘Ok, ya lo he hecho antes’. Eso es lo que me ha dado Outlander. Me ha dado confianza y eso es fantástico”.