«La Casa de Papel» es uno de los fenómenos audiovisuales que, aunque sus dos primeras temporadas fueron diseñadas para la televisión española, solo pudieron alcanzar la cima de la fama cuando Netflix compró sus derechos.
Fue a finales del 2017 cuando la serie llegó a la plataforma más famosa, y a partir del éxito que tuvieron ahí, decidieron continuar con unas tres temporadas más.
Sin embargo, a pesar de las grandes actuaciones y personajes que la producción posee, hay elementos distintivos que lograron posicionarse en la cultura pop muy rápido: el vestuario de los atracadores. Las máscaras de Salvador Dalí y los monos rojos forman parte de las cosas que no pueden faltar en ninguno de los atracos del Profesor; pero no todo el mundo sabe la razón de ser de estos llamativos accesorios, y parte del elenco dio detalles sobre esto.
Álvaro Morte, quien da vida Salvador «Salva» Martín en el seriado, expresó sobre la máscara: «Significa el espíritu que encarna a la resistencia. Creo que mucha gente se ha enganchado a ‘La Casa de Papel’ por ese sentimiento que provoca que el pez pequeño puede contra el pez grande. Para mí (…) lo que más representa esta máscara es ese espíritu de resistencia que creo que todos deberíamos tener ante cualquier injusticia».
Por su parte, Pedro Alonso, mejor conocido en la trama como «Berlín», dijo: «Es un símbolo de un espíritu que tiene que ver con el artista que, de pronto, ha trascendido ciertos límites y ha servido como soporte para hacer visible una forma de resistencia con corazón y humor». Mientras que la actriz que da vida a la inspectora Raquel Murillo en el dramático afirmó: «Significa la locura maravillosa que tenía Dalí».
Con respecto al mono y el color del mismo se sabe que fue elegido por el equipo de producción de la serie europea para representar a España en todo su esplendor, siendo el rojo un color muy icónico para el país, presente en su bandera, corridas de toros, el morrón y el azafrán; y a través del cual pueden transmitirse dos sentimientos muy presentes en la historia: rudeza y pasión.