Justo en plena crisis por la pandemia del coronavirus, que empaña al mundo entero, la princesa Sofía de Suecia, decidió cambiar su corona y vestido, por un uniforme y prestar servicios en el hospital Sophiahemmet, uno de los más antiguos de país y muy vinculado a la Casa Real.
La esposa del príncipe Carlos, ha sido muy aplaudida. En este centro sanitario ella trabaja codo con codo con otros voluntarios; su labor es principalmente desinfectar, dar apoyo y limpiar.
Después de que se enterara de que el centro de salud necesitaba voluntarios, ella decidió formarse. Desde el pasado 16 de abril, Sofia de Suecia desinfecta camas, suministros y material médico, ayuda en la cocina e higieniza las instalaciones. Pese a su trabajo altruista, la cuñada de Victoria de Suecia también ha recibido críticas. Algunas voces señalaron que solo permanecería en el hospital unos días y que su misión ya había terminado. Sin embargo, esto no es cierto, tal y como apunta la revista Svensk Dam. “La princesa continúa trabajando allí “, ha asegurado Margareta Thorgren, jefa de comunicación de la Casa Real. Parece que echar una mano en tiempos difíciles llena mucho a Sofia y estaría encantada con su nueva labor.
Por su parte, la Familia Real no puede estar más orgullosa de ella. La reina Silvia comentaba recientemente en una entrevista en Aftonbladet el esfuerzo de su nuera y destacó que “realizó una breve formación sanitaria y ahora está ayudando al personal del hospital. Por supuesto que no es enfermera, pero está muy feliz de ayudar”, enfatizó.
