Hace unos meses, Jimena Araya, más conocida como Rosita, aseguró que estaba dispuesta a contarlo todo y; aunque en el primer capítulo de su seriado en YouTube solo detalló etapas de su infancia, en esta segunda entrega abordó el tema relacionado con la justicia.
Esta venezolana siempre soñó con hacer vida en la televisión, por varios meses figuró como extra en Radio Caracas Televisión, después pasó a formar parte del equipo de Venevisión y en el momento menos inesperado llegó la propuesta de Rosita.
Con este personaje logró saltar a la fama; figurar en portadas de revistas, como imagen de distintas marcas y también aparecer en videos musicales. No obstante; cuando saboreaba el éxito todo se vio empañado cuando la vincularon con la fuga de 12 personas que estaban recluidas en El Centro Penitenciario de Aragua, más conocido como Tocorón.
Apenas se enteró de la orden de captura, recurrió a un par de amigos y decidió salir del país. Una vez recibió la llamada de su abogada para presentarse ante los tribunales, regresó a Venezuela; pero igual escapando de las autoridades. Mientras se hospedaba en Valencia, en la casa de un amigo; la policía la encontró después del llamado de vecinos y se la llevaron esposada hasta Maracay.
La actriz cuenta que en el traslado hasta la cárcel las otras mujeres que iban con ella solo intentaron llenarle la cabeza de cosas feas. Sin embargo, cuando llegó se encontró con la sorpresa de que la estaban esperando de la mejor manera.
A pesar de haber estado «tranquila», su deseo más grande era salir, porque además era inocente; por lo que decidió grabar un audio pidiéndole ayuda a Chávez. «No encontré otra solución, necesitaba hacer un llamado y estar segura de que se me tomaría en cuenta».
A todas estas, Rosita asegura que ella no salió del centro penitenciario gracias a quien para ese entonces era el presidente de Venezuela; sino que se comprobó su inocencia y el proceso legal culminó hace poco tiempo y por eso ahora es que puede hablar del caso.