los escándalos sexuales no son algo que solamente se vive en la ostentosa industria de Hollywood, también están en la industria latina y en el nuevo mundo de las plataformas digitales. El portal Badabun, es uno de los canales en español más seguidos en YouTube está atravesando uno de sus momentos más difíciles.
Juan Dios Pantoja, el CEO de este monstruoso canal de youtube renunció a su cargo luego de una serie de denuncias por acoso y maltrato en su contra. Comenzando el mes de diciembre, varios integrantes del portal revelaron a través de un video los contratiempos que tuvieron con quien fuera su jefe.
Con información de Infobae
Lizbeth Rodríguez, uno de los rostros más populares de Badabun gracias al programa Exponiendo Infieles, habló por primera vez del escándalo que envuelve al canal de YouTube y descartó que siga trabajando con esa empresa.
La propia Lizbeth había hablado en noviembre que se sentía un tanto controlada por Badabun y semanas después Alex Flores, Kim Shantal, Daniela “Queen” Buenrostro, Kevin Achutegui y Dani Alfaro revelaron que fueron víctimas de acoso sexual, homofobia y explotación laboral.
“Si yo no dije nada antes es por un miedo, es por un juego mental que el CEO de esa empresa acostumbra hacer con todos los que lo rodean. Es un miedo que psicológicamente te meten”, aseguró Juan de Dios Pantoja al inicio del material, en el que también reveló que había sido testigo del mal trato que se le daba al talento de Badabun, el canal de YouTube con mayor número de suscriptores en el mundo de habla hispana.
Los integrantes del canal señalaron además que habían perdido el control en sus cuentas de YouTube e Instagram.
La semana pasada se supo que César Morales Jiménez fue removido de su cargo de director general de Badabun, luego de estar involucrado en las acusaciones de los youtubers.
“Todo el equipo que conformamos la empresa lamentamos profundamente los hechos sucedidos durante los pasados días, razón por la que César Morales Jiménez ha sido removido de su posición como Director General”.
“Nuestra visión es siempre trabajar bajos los lineamientos de honor y justicia, de tal forma que en caso de ser requerido habremos de cooperar enérgicamente con las instancias y autoridades pertinentes con el objetivo de que se deslinden responsabilidades o se hagan valer las leyes en nuestro país”, señaló el canal en un comunicado.
Tras los días de polémica, Lizbeth subió ayer a YouTube un video titulado “Cerrando ciclos. Adiós 2019”, en donde respondió durante más de 40 minutos a preguntas de sus seguidores.
En varias ocasiones Lizbeth aseguró que ella no tenía conocimiento de la situación que atravesaban sus compañeros y negó haber sido víctima de acoso.
Alrededor del minuto 18 respondió a la pregunta de si seguirá en el canal, a lo que respondió:
Me duele mucho dar esta respuesta, pero tengo muchos amigos que se quedaron sin trabajo, de los cuales conozco su vida… Yo creo que ya no hay Badabun, amigos. No hay manera de seguir en algo que ya no existe
La presentadora de Exponiendo Infieles (el programa donde ofrecía dinero a parejas para revisar sus teléfonos celulares y verificar si eran fieles) explicó que aún tiene contratos por cumplir y no le gusta dejar las cosas a medias. “Voy a terminar lo que empecé (y) bye”.
Al inicio del video, Lizbeth dijo sentirse «triste, abrumada, desconcertada, decepcionada y rara» acerca de lo que estaba ocurriendo con Badabun.
Comentó que se sentía hasta ese momento una mujer muy fuerte, pero su mundo de color de rosa se desmoronó. «Me sentía mal de que había cosas que no sabía que estaban pasando. Me siento mal por todos mis amigos», aseguró.
Dijo que al tener un hijo y una renta por pagar no puede dejar de trabajar y reconoció su tristeza por no haber sabido de los problemas de sus compañeros y sus planes de dar todo a conocer a través de un video.
“Si ellos me hubieran contado lo que estaba pasando hubiera sido la primera en alzar la voz… Me hubiera gustado que me tuvieran la confianza”.
Lizbeth insistió en que “jamás me tocó ver nada malo” y que a ella no le pasó nada relacionado con acoso.