Durante una ardua excavación en el suroeste de Francia, justo donde se han desenterrado desde el 2010 los restos de algunos de los animales más grandes que existieron en la Tierra, paleontólogos franceses hallaron el gigantesco fémur de un dinosaurio.
Según los expertos, el hueso de 2 metros de largo y 400 kilos, que fue hallado en la localidad de Angeac-Charente, perteneció a un saurópodo, un subgrupo de dinosaurios herbívoros, de cuello largo y cuatro patas.
Según el paleontólogo del Museo de Historia Natural de París, Ronan Allain, acotó en un diálogo con los medios locales, que este fémur izquierdo forma parte de un conjunto de huesos que está cerca de ser completado, además señaló que este saurópodo «posiblemente debía de tener unos treintena de metros de largo».
Lo más asombroso de ello es el impecable estado en el que se encontró, «Este es un gran descubrimiento. Me sorprendió especialmente el estado de conservación del fémur. Estos animales probablemente pesaban 40 o 50 toneladas» dijo Allain.