Hope Barden, una joven de 21 años trabajadora de una tienda de productos y shows sexuales en Reino Unido, murió asfixiada tras sostener un juego erótico con un cliente vía webcam.
La joven fue hallada muerta en marzo del pasado año, pero no ha sido hasta ahora cuando la policía de Staffordshire ha detallado que Jerome Dangar había presenciado los momentos previos a la muerte de la joven, sin avisar a las autoridades, y por lo tanto fue declarado responsable de su muerte.
El hombre realizaba pedidos cada vez más violentos que la joven tenía que realizar para que él la observase a través de la webcam. Tras varios meses de investigación, Dangar ha sido finalmente declarado culpable.
Además, el hombre poseía fotografías en las que la joven se encontraba en riesgo de muerte por asfixia o apuñalamiento. Esta acusación ya no sirve para inculpar a Dangar, ya que el joven se quitó la vida el pasado mayo en su celda mientras se encontraba en prisión.