El venezolano es conocido por ser una persona «farandulera» y para la ejemplo de ello, podemos revisar Instagram, donde podrás ver infinidades de fotos de muchos ciudadanos posando tranquilamente el pasaje Linares en el centro de Caracas.
La nueva moda de los paraguas multicolor ha causado mucho disgusto entre los venezolanos o al menos entre los caraqueños, ya que muchos alegan que «esta nueva tendencia» es simplemente un maquillaje que intenta tapar los problemas que padece la capital venezolana.
Según CrónicaUno, la llegada de las sombrillas multicolores al centro de la ciudad no tiene explicación alguna, al menos es lo que dice un trabajador de la Alcaldía de Caracas, quien reveló que fueron enviados por “un artista francés desde Panamá”.
Los paraguas tapan la lluvia de problemas que está dañando a Caracas
La capital criolla está incluida en el ranking internacional de «las ciudades más peligrosas del planeta», pues la inseguridad es uno de sus principales problemas y sumándole la constantes fallas de los servicios básicos, la crisis de transporte público y el mal estado de las vías, hacen que los «paraguas de colores» sean un adorno innecesario en la escala gris en la que está sumergida la ciudad de los techos rojos.
El costo toque colorido al pasaje Linares costarían 1917,6 dólares (352,5 salarios mínimos), dinero que podía ser invertido para dar solucionar cualquiera de los problemas anteriormente expuestos.
De tal manera, que para darle un toque crítico a esta los 240 paraguas y aquellos que por «farándula» se fotografían para unirse a la moda del proyecto Umbrella Sky, el diseñador gráfico Francisco Bassim decidió realizar un crudo montaje que deja claro la realidad de Caracas y toda Venezuela.