En junio de 2017 Neomar Lander, de 17 años, se convirtió en símbolo de los cientos de jóvenes que perdieron la vida durante las protestas antigubernamentales en el país, tras recibir un disparo a manos de la Fuerza Armada Nacional luego de varias semanas de protesta.
Su familia tuvo que huir del país en busca en un nuevo futuro y justamente este 23 de enero le dieron la bienvenida a un nuevo miembro de la familia, Alan Lander, quien fue vestido con los colores de la bandera venezolana por su madre.
“Siempre fuimos a protestar juntos. El nunca llevaba escudo, pero el último día lo llevó. Murió del impacto de una bomba lacrimógena en el pecho”, explica su madre Zugeimar, horas después del parto de su segundo hijo, que nació en el hospital «12 de Octubre» de Madrid.
El escudo de cartón contra las balas y una piedra y una flor fueron elementos clave para identificar al joven que entonces se popularizó entre las históricas fotos que le dieron la vuelta al mundo. “Es mi foto favorita. La bomba molotov y la flor. Representa la valentía y también la inocencia que nunca dejó de tener”, explicó la madre de Neomar Lander.
La familia del joven publicó una serie de tiernas fotografías del pequeño recién nacido.