Mariah Carey está entablando una demanda por más de 3 millones de dólares contra una asistente que la grabó en secreto haciendo cosas «vergonzosas» y luego amenazó con publicar videos a menos que la cantante pagara $ 8 millones.
Lianna Azarian fue contratada por Mariah en marzo de 2015 como asistente ejecutiva. La cantante afirma que no pasó mucho tiempo antes que Azarian procediera a hacer compras personales con su tarjeta de crédito con la excusa de que estaba comprando cosas para Mariah y obteniendo descuentos con ese argumento.
Carey también manifestó que sin saberlo, Azarian estaba filmando en secreto sus «actividades personales», que, según ella, serían «embarazosas» y extremadamente dañinas tanto a nivel personal como profesional si se revelaban.
Azarian mostró algunos de los videos a sus amigos, y señaló que si alguna vez la despidieran, los vendería.
Carey afirma que le estaba pagando a Azarian hasta $ 327,000 al año, pero terminó despidiéndole en noviembre de 2017, y desde entonces comenzó el chantaje. Carey dice que Azarian exigió $ 8 millones y que si no lo conseguía, publicaría los videos y otra información dañina.
La demanda no dice qué hay en los videos, sin embargo, algunos se describen como «íntimos». Mariah dice que también ha pedido que se devuelvan los videos y otra evidencia de actividad criminal.