El 2019 comenzó mal para el actor Kevin Spacey, pues este lunes compareció a los tribunales de Massachusetts para defenderse de las acusaciones por acoso sexual, de la cuales está implicado desde 2017.
El Ganador del Óscar decidió declararse no culpable de los cargos de asalto indecente a los que se enfrenta. El intérprete ha sido acusado por la periodista Heather Unruh de haber manoseado los genitales de su hijo cuando este tenía 18 años y trabajaba en un bar de la isla de Nantucket. El incidente se habría producido en 2016 y ha contribuido a hundir la carrera del que era uno de los actores más queridos por el público.
Spacey compareció ante el juez con un traje de chaqueta oscuro y gesto distendido, tanto que intercambiaba risas con su abogado minutos antes de que se abriese la vista. El magistrado le impuso una orden de alejamiento de su presunta víctima mientras dure el juicio, que se reanudará el próximo 4 de marzo. El actor dejó que hablara su representante legal, quien pidió al tribunal que preserve durante seis meses los datos del teléfono móvil de la víctima, que según la defensa habría intercambiado mensajes de texto con su novia el mismo día de la presunta agresión. Esos mensajes, dijo el abogado Alan Jackson, son “probablemente exculpatorios”.
Con información de EFE