Kim Kardashian no se dejó llevar por las críticas de su celulitis, tras la publicación de fotos sin retoques de la socialité en traje de baño, y volvió a exhibir todo su cuerpo en Instagram, cubierto solo por un diminuto bikini que deja muy poco a la imaginación.
En su propia cuenta, Kim publicó la fotografía de ella disfrutando un día en la playa con una de sus amigas y dos millones de seguidores indicaron que le gusta su trasero «100% natural».