El actor español Antonio Banderas, que sufrió a principios de año un ataque al corazón y tuvo que pasar por quirófano en dos ocasiones, aseguró hoy que se encuentra «muy bien» de salud y que no se plantea una nueva intervención coronaria.
«Me encuentro de puta madre (sic) y por el momento no voy a volver a operarme del corazón», señaló a Efe el cineasta, que presentó en Marbella (Málaga, sur de España) su nueva línea de complementos, ‘Antonio Banderas Design’, diseñada para Starlite Shop.
De momento me encuentro muy bien y he llegado al acuerdo con mis doctores de que no va a haber otra operación, salvo que en el futuro se vuelvan a reproducir las arritmias y entonces se puede hacer la operación
El actor, a quien implantaron tres ‘stents’ en las arterias coronarias y posteriormente se sometió a una termoablación para eliminar las arritmias que sufría, explicó que «la primera intervención es la parte mecánica; y en la segunda, la parte eléctrica, existe la posibilidad de que se vuelvan a reproducir las arritmias».
«De momento me encuentro muy bien y he llegado al acuerdo con mis doctores de que no va a haber otra operación, salvo que en el futuro se vuelvan a reproducir las arritmias y entonces se puede hacer la operación», apuntó.
Banderas estudia Diseño desde hace dos años y medio en una universidad de Londres y destacó, sobre su colección de complementos, que está inspirada en la cultura mediterránea y el «sueño europeo después de la Segunda Guerra Mundial».
«Tiene que ver con los colores azules, con un tipo de gafas muy años 50 y con personajes como María Callas, Jean Paul Belmondo, Federico Fellini, la Dolce Vita, el nacimiento del festival de Cannes, San Remo», indicó el actor.
En cuanto al cine, en las próximas fechas van a coincidir los estrenos de distintas películas en las que el intérprete es protagonista o ha colaborado, pero Banderas destaca especialmente la cinta ‘Life itself’, dirigida por San Fogelman y con Olivia Wilde y Oscar Isaac en el reparto.
«Es una historia muy interesante y muy potente que se desarrolla en dos espacios completamente diferentes como son Nueva York y unos olivares de un pueblo sevillano y que tengo la impresión de que va a hacer ruido», añadió.