Sin saberlo, el mundo del cine estuvo a punto de perder recientemente a una de sus grandes estrellas, el polifacético Jared Leto, quien estuvo muy cerca de sufrir un accidente fatal mientras practicaba una de sus pasiones fuera de las cámaras, la escalada, en el Parque Nacional de Yosemite (Estados Unidos).
«Hace poco estuve a punto de morir. Ya he estado cerca de no contarlo en varias ocasiones. Esta vez, estaba en Yosemite, colgando literalmente del mirado Taft Point, que está a unos 3.000 pies de altura mirando al valle. Recuerdo que tuve una conversación muy reveladora conmigo mismo. ¿Sobre qué? Sobre lo inútil que resultaría en aquel momento perder la cabeza, sobre lo importante que era para mi propia supervivencia que conservara la calma tanto como pudiera», ha recordado la estrella de cine en una entrevista.
«El acto en sí de escalar es una conversación profunda e introspectiva con uno mismo acerca de tus limitaciones y tus habilidades. Implica un montón de éxito y fracaso. Y aprendes un montón. Me encanta».
Entre sus aficiones deportivas, su carrera musical como líder del grupo Thirty Seconds to Mars y su impresionante trayectoria cinematográfica -tiene pendiente de estreno la secuela de ‘Blade Runner’.
Más allá de su trabajo humanitario al frente de varias organizaciones en defensa de los derecho de los niños y el medio ambiente y su pasión por los personajes retorcidos y oscuros, poco se conoce de la vida de uno de los artistas más misteriosos y extravagante de la meca del cine, en gran parte debido a que no se prodiga por los saraos del mundo del entretenimiento ni se rodea de un grupo de amigos tan famosos como él, a excepción de otra celebridad: Leonardo DiCaprio.
Fuente: Cosmopolitan.