Si no lo sabías, te ponemos al tanto. El reconocido rockero venezolano Paul Gillman fue sacado de la lista de presentaciones en el festival Rock al Parque el Colombia, gracias a una ola de criticas por parte de venezolanos residentes en el país hermano. El músico en cuestión, se le criticó mantener una estrecha amistad con personalidades del chavismo y también apoyar la ideología socialista que ellos profesan.
Ahora, ha una semana de la polémica el metalero criollo ha dado par de declaraciones al respecto, siendo la última al diario colombiano «El Tiempo». Gillman, de 57 años, desmintió las versiones que lo señalan de ser «amigo» del presidente Maduro sobre quien dice mantener una distancia normal para un jefe de Estado, aunque reconoció que el mandatario tiene cierta cercanía hacia el rock ya que, los venezolanos un presidente que viene de una banda de rock pesado, llamada enigma.
«En la historia universal, jamás un presidente ha llegado a un país habiendo sido miembro de una banda de rock pesado. Eso es Nicolás Maduro, por eso tiene tanta sensibilidad con respecto al rock. Esa es mi única relación con él. De resto no hablamos, ni voy a su casa ni nada», dijo el rockero vetado.
Paul reiteró a ese diario que su intención de venir a Bogotá como artista invitado a la edición 23 del Festival de Rock al Parque no era para hacer política; sino para hacer buena música y poner a gozar al público botogano.
Por otro lado, ratificó que el responsable de todo este embrollo, es el empresario y organizador de eventos Julio Correa, miembro fundador del festival en cuestión donde fue vetado Gillman. Según el, hubo una campaña de odio en su contra en las redes sociales y por tal razón Idartes, decidió sacarlo de la parrilla de presentaciones.
Hace poco, nos esteramos que el cantante venezolano está realizando una contra campaña para recaudar firma para quee Idartes regrese lo regrese al cartel de Rock al Parque apelando al derecho a la libre expresión consagrada en la Constitución Política, y a la esencia apolítica con la que el festival se ha presentado desde sus inicios.
Sin embargo Idartes aclaró, mediante un comunicado, que no fueron las posiciones ideológicas de Paul Gillman las que determinaron la cancelación de su presentación en Bogotá, sino la “campaña de desprestigio contra la participación del artista en Rock al Parque, lo cual pone en riesgo el buen funcionamiento del festival y la seguridad de quienes participan en él”, es decir, un tema de orden público que, no obstante, fue criticado por la cancillería venezolana.
“Esta actitud políticamente motivada (…) demuestra una visión intolerante, excluyente y que extiende la agenda hostil y de agresión contra el gentilicio venezolano que se ejecuta desde Colombia“, aseguró el Ministerio de Relaciones Exteriores venezolano, según EFE.