Para celebrar su aniversario 125, Vogue USA reunió en su portada a siete de las modelos del momento. La publicación buscó la diversidad en su tapa e incluyó también a la maniquí de talla grande Ashley Graham. Pero, lejos de ser alabada por esta decisión, la revista recibió un aluvión de críticas.
Para la edición de marzo apostaron, según sus palabras, por «la diversidad donde no importan las medidas, el color de la piel o los rasgos físicos».
En la portada de su último número se puede ver a las modelos Liu Wen, Ashley Graham, Kendall Jenner, Gigi Hadid, Imaan Hammam, Adwoa Aboah y Vittoria Ceretti luciendo camisetas negras y shorts de colores.
Pero lo que pretendía ser un buen mensaje de Vogue terminó en polémica. Muchos usuarios en las redes sociales acusaron a la revista de retocar a Graham (segunda a la izquierda) para que luzca más delgada.
Además, hay otro detalle que no pasó desapercibido. Graham es la única que aparece con la mano sobre la pierna, cubriendo con su brazo parte del muslo, mientras dos de sus compañeras le tapan el abdomen. Una pose que muchos ven como un intento de Vogue por «adelgazar» a la modelo.
Pero las críticas por el uso del retoque fotográfico no terminaron ahí. Los internautas también pusieron su atenta mirada sobre la mano de Gigi Hadid (medio) que parece sospechosamente más larga de lo normal.
Sin embargo, la propia modelo defendió a la revista en su cuenta de Instagram: «Elegí posar así, nadie me dijo que hiciera nada». Hace unos días, acaparó titulares al enseñar su celulitis con orgullo en las redes.