La partida de Barack Obama, y su familia de la Casa Blanca se acerca, ayer el aún presidente de Estados Unidos pronunció su discurso oficial de despedida en la cuidad de Chicago.
Durante el evento que era seguido en vivo en todo el mundo, el mandatario habló de los logros, los retos e impulsó a los ciudadanos a seguir luchando por una nación incluyente. Sin embargo, el momento más emotivo llegó cuando le tocó hablar de su esposa.
A punto de romper en llanto, Obama agradeció el apoyo de su esposa, quien, dijo, ha llenado de orgullo al país.
«En estos últimos 25 años, has sido no sólo mi esposa, sino mi mejor amiga. Asumiste un rol que no te fue pedido y lo hiciste con gracia y estilo y buen humor. Hiciste que la Casa Blanca fuera un lugar abierto a todos. Me has hecho sentir orgulloso y has hecho sentir orgulloso a este país», dijo conmovido en medio de aplausos y ovaciones para la primera dama.
Al escuchar las palabras de su esposo, Michelle sonrió mientras miraba a su hija Malia, quien tampoco pudo evitar las lágrimas.
“Se han convertido en dos jóvenes mujeres sorprendentes, inteligentes y hermosas, pero más importante, amables y llenas de passion. Llevaron con facilidad la carga de estar durante años delante de las cámaras. De todo lo que he hecho en mi vida, lo que más me hace orgulloso es ser su papá«, añadió, refiriéndose a sus hijas.
¡Bravo!