Esta semana ha tenido lugar en una ceremonia íntima el entierro de Carrie Fisher y su madre Debbie Reynolds. Esta despedida de sus familiares y amigos más cercanos tienen pensado hacer en un futuro una ceremonia pública- se ha hecho viral debido a la elección de la urna de las cenizas de Fisher: una píldora gigante de Prozac.
La vida de Fisher no fue fácil y tuvo que tomar medicación la mayor parte de su vida para lidiar con distintas adicciones y su bipolaridad, pero siempre hizo gala de su buen humor y positividad, es por ello que la querida actriz tenía en su casa una urna enorme con forma de pastilla de Prozac, objeto que pronto se convirtió en uno de sus favoritos:
«La posesión favorita de Carrie es una píldora gigante de Prozac que compró hace muchos años. Carrie era una mujer increíblemente positiva que defendía los tratamientos de salud mental y de concienciación. Estamos muy agradecidos por su trabajo para reducir el estigma de su enfermedad», ha explicado a The Hollywood Reporter el hermano de la actriz que además ha señalado que esta urna es de los años 50 y de porcelana.
De esta forma, Todd Fisher ha querido arrojar luz ante la peculiar urna y ante los comentarios que esto está generando en Internet siendo la mayor parte de ellos positivos. La lucha de Fisher ha sido larga fuera de la pantalla y es por eso que muchos la recordarán más allá de su faceta como actriz.