[dropcap]L[/dropcap]as pruebas de la sencillez de la familia Obama no acaban y es que hace unos días, Sasha y Malia, hijas de la pareja presidencial de los Estados Unidos, acapararon la atención de la prensa al hacer compras en tiendas de modalow cost en una visita a España. Ahora, es la menor de ellas, Sasha, quien ha despertado admiración tras revelarse que estas vacaciones trabaja como mesera en un restaurante de mariscos.
Aunque se pretendía mantener en secreto el oficio de verano de la joven de 15 años, la prensa ha dado con ella y hasta ha difundido fotografías de su trabajo.
Según publicó The Boston Herald, Sasha trabaja en Nancy’s, un restaurante de mariscos ubicado en Martha’s Vineyard, una isla situada en la costa este de Estados Unidos. Allí se ha desempeñado como mesera y cajera con su nombre completo, Natasha, con el fin de evitar la sobreexposición.
De acuerdo con uno de sus compañeros de trabajo, Sasha ha mostrado gran disposición y hasta ha llegado horas antes a la apertura para preparar el restaurante. Sobre su identidad, el mismo informante añadió que antes de que supieran quién era se preguntaban por qué había seis personas cuidándola: «luego descubrimos de quién se trataba».
Durante su labor, Sasha ha estado resguardada por seis agentes del Servicio Secreto, quienes se han mantenido alejados y sin interrumpir las tareas de la hija menor del presidente. Incluso, explica el diario, al finalizar su primer día de trabajo la joven se acercó a ellos y les entregó unas bebidas para luego marcharse.
Sasha trabaja cuatro horas en un horario matutino en este restaurante, que es el favorito de sus papás cuando van a la isla de vacaciones. Asimismo, se ha detallado que Barack y Michelle Obama son amigos de Joe Moujabber, dueño del lugar.
Se cree que la joven estará trabajando allí hasta el sábado, fecha en la que se espera que el resto de su familia llegue a la isla a vacacionar.
Evidentemente, la menor de las hijas de Obama no tiene necesidad de trabajar, sin embargo, se dice, esta medida ha sido tomada por sus papás para hacerla consciente del valor del trabajo y acercarla a la realidad social.