Que una familia real se acerque de algún modo al colectivo LGBT es realmente excepcional, por no decir inaudito. Sin embargo, el Príncipe Guillermo acaba de anunciar su compromiso con esta comunidad de una manera sorprendente. El Duque de Cambridge y su mujer, Kate Middleton, acudieron a la Embajada de Estados Unidos a mostrar sus condolencias por la tragedia de Orlando. Allí reveló que aparecería en el próximo número de Attitude, una célebre publicación de temática gay.
Se acaba de desvelar la portada de ese número tan especial, que incluye titulares tan reveladores como: «Nadie debería ser acosado por su sexualidad ni por ninguna otra razón».
No es la primera vez que un miembro de la familia real británica se pone del lado de los homosexuales. En 2013, se reveló que el Príncipe Harry defendió a un compañero de un ataque homófobo. Fue durante un entrenamiento militar, en 2008, y consiguió que un grupo de acosadores hiciera la vida imposible a un soldado por su condición sexual.
Que una familia real de tan rancio abolengo como los Windsor hagan un declaración de intenciones como ésta dice mucho de su modernización y de cómo se quieren adaptar a una sociedad en constante cambio. Y, de hecho, un acto como esta portada les va a hacer subir enteros de popularidad al instante.