Era una de las estrellas más esperadas en edición de 2016 (y más tras su aparición con aquel mítico vestido de tul rosa en la de 2015) pero Rihanna no hizo acto de presencia en la 58º edición de los premios Grammy. La artista canceló en el último minuto, literalmente, porque incluso llegó al Staples Center de Los Ángeles e hizo todo el ensayo, según informa Billboard.
¿Miedo escénico? ¿Capricho de diva last minute que le impidió incluso pasar por la red carpet? No, fueron motivos médicos los que impidieron a Rihanna cumplir con este compromiso.
Tal y como informa su representante, el especialista le ha recomendado reposo de voz durante un mínimo de 48 horas. RiRi llevaba ya 3 días tomando antibióticos por una infección de garganta y, al parecer, éstos no funcionaron todo lo bien que se esperaba. Hasta tal punto que no ha podido cantar en los Grammy.
Sin embargo, la noche antes la cantante sí pudo actuar en la gala MusiCares, un homenaje a Lionel Richie. Como vemos en la imagen, Rihanna subió el escenario (con un vestido de print floral transparente de Marc Jacobs) e hizo las dos cosas que mejor sabe hacer: cantar y dejar al público boquiabierto. Sin embargo, en la noche de los Grammy no le ha quedado más remedio que quedarse como espectadora del show.