[dropcap]D[/dropcap]espués de sorprender por su extrema delgadez en unas fotografías, el actor Liam Neeson explicó que tuvo que bajar de peso para su papel en la película Silence, el nuevo filme del director Martin Scorsese.
«Martin (Scorsese) quería que todos nosotros estuviéramos más flacos», declaró el artista irlandés a Entertainment Tonight en referencia a sus coprotagonistas Adam Driver y Andrew Garfield.
El protagonista de Taken había sido retratado meses atrás durante un paseo en Nueva York y su apariencia física llamó mucho la atención de sus admiradores: estaba muy flaco y con el rostro demacrado. Inmediatamente, tanto en las redes como en diferentes medios, se comenzó a especular con que el artista podía estar enfermo.
En declaraciones a la revista Variety, Neeson comentó: «Scorsese trabaja al 200%, y a ti sólo te pide que des el 100%. Da miedo. Exige silencio absoluto en el set: si escucha el más mínimo sonido, se pone furioso».
Neeson interpreta a Cristovâo Ferreira, un jesuita renegado en el Japón feudal que tras ser detenido y torturado acepta integrarse a la sociedad nipona. Silence -que se estrena a fines de 2016- es el segundo trabajo de Neeson junto a Martin Scorsese tras Gangs of New York.