[dropcap]P[/dropcap]ese a que un juez le ha reconocido como hijo de Carlos Baute, lo cierto es que José Daniel Arellán no mantiene buena relación con su padre y a sus 26 años sigue esperando un reencuentro con él.
Este joven, fruto de la relación del venezolano con un amor de juventud, Náyera Arellán, vive en Andalucía y estudia Administración. Su madre se quedó embarazada con apenas 14 años y Baute se fue de Caracas para seguir su carrera profesional junto al grupo juvenil Los Chamos.
Pero ahora el joven ha concedido una entrevista en exclusiva para la revista Pronto en la que ha dejado claro: “Creo que llevar el apellido Baute es un derecho que me pertenece y es importante para hacer justicia a mi madre”. Además revela que el representante del cantante fue a su encuentro cuando murió el padre del artista y que Carlos y él se fundieron en un abrazo cuando llegó a la capilla: “Pensé que íbamos a tener cierta comunicación, pero no fue así”.
Además añade: “Mi madre no me inculcó rencor contra él. Y, pese a mi experiencia, no lo he sentido nunca, aunque emocionalmente tendré la carencia de la figura de un padre”.