[dropcap]T[/dropcap]odo empezó con las nominaciones a los MTV Video Music Awards reveladas esta semana cuando, en la categoría Mejor vídeo del año, artistas como Rihanna o Nicki Minaj brillaron por su ausencia. Hablamos de B**** Better Have My Money! el clip más polémico del año que rompió internet y de Anaconda, la coreografía que confirmó la derrière como tendencia mundial. Normal que la artífice de este último, la rapera Nicki Minaj criticara públicamente que su video solo se mencionara en categorías inferiores: «si tu vídeo celebra las mujeres muy flacas estará nominado».
Taylor Swift que sí estaba nominada en esta categoría -la única mujer, junto a Beyoncé- se lo tomó como un ataque personal y le respondió con dos mensajes recordándole que ella siempre la había querido y respetado y que no parecía propio de ella incitar a la mujeres a competir entre sí. Por último la invitó a subir con ella al escenario en caso de que se llevase la estatuilla: «siempre serás bienvenida en una escenario en el que yo esté».
Aunque Minaj se apresuró en contestar que no debería haberse dado por aludida, Katy Perry también estuvo rápida y aprovechó la ocasión para criticar a su archienemiga: «Encuentro irónico presentar el argumento de poner a las mujeres en contra de otras mujeres cuando te aprovechas de todos los medios para derrotar a otra mujer». Con este tuit podría estar refiriéndose a Bad Blood, el vídeo de Taylor que dicen las malas lenguas, se inspiró en ella.
Mientras los cuchillos volaban alguna despistada como Kim Kardashian se metía en la polémica «sin querer» y los fans de las divas mantenía un caluroso debate. Finalmente y para acabar con la discusión que se alargó días, Taylor optó sabiamente por rectificar y pidió diculpas: «Pensé que el mensaje era para mí. Perdí el punto, lo entendí mal y me equivoqué. Lo siento Nicki». A lo que ésta contestó amablemente y dando el asunto por zanjado: «Gracias, significa mucho para mi».
¿Qué habrá pasado ahí?
